El blog de Golcar

Este no es un reality show sobre Golcar, es un rincón para compartir ideas y eventos que me interesan y mueven. No escribo por dinero ni por fama. Escribo para dejar constancia de que he vivido. Adelante y si deseas, deja tu opinión.

Archivar para el mes “octubre, 2016”

«Textos de la concupiscencia cotidiana» en dominios amazon

P(u)ateando la vida. Otro blog de Golcar

Preparación

Inhale… Exhale… Cuente hasta diez… Abra su mente…

«Textos de la concupiscencia cotidiana» es una compilación de textos que calbalgan entre el cuento, el relato, el poema y la crónica salpicados de sexo y cotidianidad. Son historias en las que la fuerza vital la marcan el sexo y los impulsos sexuales. No son textos eróticos, son textos concupiscentes, historias «pecaminosas» en las que impera el impulso erótico y erógeno de los personajes, el cual determina el discurso y puede hacer saltar los prejuicios de los lectores y los sentimientos de culpa por ciertos hechos o actos poco comprendidos o asimilados por algunas mentes de personas que podrían haber sentido esos impulsos alguna vez o que no llegan a comprender, imparcial y desprejuiciadamente, el hecho de que algunos seres humanos tengan maneras diferentes de experimentar el sexo a las que conocemos mayormente.

Antes de afrontar la…

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«¿Dónde queda Venezuela?» en dominios amazon

P(u)ateando la vida. Otro blog de Golcar

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Libro «¿Dónde queda Venezuela?»

P(u)ateando la vida. Otro blog de Golcar

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Presentación

Son 18 años ya. Casi dos décadas, desde que mi país se empezó a desvanecer.

Paulatina y progresivamente, venezolana fue dejando de ser una nacionalidad para convertirse en una angustia. Venezolano ya no fue más un gentilicio; ha devenido en una puntada en el pecho.

Venezuela se me hizo un karma. Angustia. Dolor. Zozobra. Temor. Desasosiego. Inquietud. Sufrimiento.

Me fui yendo de mi país sin medios de trasporte de por medio. Un exilio sin moverme del lugar.

Mis raíces fueron sacadas de la tierra y amputadas.

El país se tornó úlcera sangrante, dolor, desarraigo. Empecé a ser un paria sin apenas notarlo. Hikikomori. Insiliado.

En estos casi cuatro lustros, cuando deberíamos haber tenido por lo menos cuatro gobiernos diferentes, hemos estado bajo el yugo de un mismo régimen.

Venezuela fue, poco a poco, diluyéndose frente a nosotros. La metamorfosis no ha sido de un solo golpe, como…

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El jardín de la poesía

P(u)ateando la vida. Otro blog de Golcar


Salí al jardín a recoger unos poemas.
Hallé mangos, nísperos, guayabos en flor.
Había rosas rojas recién abiertas,
Claveles cubiertos de rocío.

No había palabras entre el follaje.

Un gato jugueteaba con la tierra
Abría un hoyo con paciencia y dedicación
Después de defecar,
con la misma precisión, lo tapó.

Ni rastro de un verso.

Una mariposa aleteó con alas de pan de oro
Y una abejorro zumbó cerca de mi oreja

Un colibrí sin dejar de batir sus alas
Sorbió el néctar de una cayena.

Los capachos anaranjados y amarillos
Se mecían con la brisa de la tarde
Hacían una danza con las calas rojas

Y la albahaca perfumaba el aire.

Una falsa coral serpenteaba
entre la piedras del jardín zen
dejando la onda de su huella
en la arena blanca,
dorada por el sol del atardecer.

Por ninguna parte había rastros del poema.
Decepcionado, me senté a escribir.

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CuenTUITos #C140

P(u)ateando la vida. Otro blog de Golcar

c140-2I
No hubo parte de tu cuerpo que no quedara en mi boca. Y allí te dormiste.

II
Sacó el llavero del bolsillo. Las llaves se volvieron eslabones de una cadena atada al pie con un grillete. Ya no podría huir

III
Huía despavorido de sus llaves. Sabía que no servirían para que otros no entraran, sino para no permitirle a él salir.

IV
Cuando el viejo escuchó «Campanitas de Cristal» bailó por dos segundos. Sonrió. Y regresó al silencioso mundo de su alzheimer

v
Vivía gracias a la culpa. Al bautizarlo, limpiaron el pecado original pero no le quitaron la culpa. Murió al saberse inocente.

VI
Le prendió fuego al cañaveral y derribó el ingenio a mazazos. Quiere que le agradezcamos habernos enseñado a no tomar azúcar.

VII
Se imaginaba a sus amigos virtuales hablando por MD de él. Su paranoia se exacerbaba cada vez que le sonaba el…

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Tía Amapola 28 – Ruperti y los sobrinos, plebiscito de Colombia, Miss Venezuela y el Premio Hugo a la Paz

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miss-venezuela

—Hay que ver que esos gringos no tienen temor de Dios, mi niño. Es que no respetan ni la memoria de los muertos. ¿Vistes que hasta la amistad de los muchachos con el difunto Hamudi la han sacao a relucí? ¡No respetan ni la paz de los sepulcros! A veces quisiera como ‘el barón de la droga’, mi niño, a ese sí es verdá que no le tiembla el pulso pa’mandá pa’l otro barrio al que se le atraviese en el camino. Ja ja ja Ese Jarvis es tan bravo, mi niño, que en estos días me escribió contándome como mandó al barrio de los acostaos a Rafaat, ‘Rataat’ como le dice El Barón.

Tía Amapola estaba sentada frente a la peinadora quitándose los rollos del pelo. A pesar de tanto salón de belleza y tanto periquito que tiene para el cuidado del cabello, tía Amapola no…

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458 años de Mérida

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merida
A Mérida
siempre vuelvo.
Siempre he de volver, por lejos que esté.
Allí me llevan mis sueños y ensoñaciones.
En sus cielos está sembrado mi corazón.

A Mérida siempre voy porque la llevo dentro.
Sus plazas, sus jardines, mi casa en La Parroquia…

Mérida es mi infancia feliz por las calles de La Parroquia con una olla de aluminio al brazo llena de los pasteles de mamá para vender de casa en casa.

A Mérida vuelvo al ver una perra callejera blanca.
Como aquella «Putica» que se pavoneaba en la plaza.

A Mérida me llevan cada día los recuerdos
Los sueños, la memoria.
Un día gris es la niebla merideña.
Un riachuelo es el Albarregas cuyo rumor entraba por mi ventana en las noches.

Una cala roja, es Milla, donde Las Rojas
Con el traqueteo de sus máquinas de coser
Ucha tallando ovejas en anime y Tata haciéndome un pantalón…

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Cuerpo, sombra y nombre

Visiones contemporáneas – Artistas zulianos en el CAMLB

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camlb

Luis Cueva – Ender Colina –  Omar Patiño – Gustavo París – Ana María Nava – Luisa Ferreira – Régulo Rincón – Hilda Benchetrit – Andreína Portillo -Mario Labarca – Giovanni Paseri – Elsy Zavarce – Irma Parra – Pedro Morales – Lourdes Peñaranda – Lía Bermúdez – Miguel Meza – Carlos Romero – Luis Gómez  – Adolfo Morales – Jesús Pérez – Johel Ríos – Beto Frangieh – Dina Atencio – José Henrique González – Mario Colina – Johan Galué – Antonio Vargas – Carlos Sánchez – Lina Peña – Serafím Sousa – Mary Bellorín – Alejandro Vázquez – Fernando Bracho – Elvis Rosendo – Edgar Queipo – Ender Cepeda – Carmelo Niño – Gipsy Rangel – Milagros Quintero – Maira Reverol – José Gotopo – Angel Peña – Francisco Verde – Víctor Rosales – Mikele – Martín Rincón – Audio Cepeda – Roberto Urdaneta – Gloria Castillo – Álvaro Paz…

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Siete años con este desahogo

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blog

Hoy estoy cumpliendo siete años con mi blog. Una aventura que empecé sin pensar ni planificar. Cuando lo inicié creí que sería un tiempito, una fiebre porque nunca he sido constante con casi nada. Y hoy me sorprende cuando wordpress me anuncia que son ya siete años escribiendo y publicando pistoladas.
Gracias a todos los seguidores, a los lectores consecuentes, que siempre han tenido una palabra de estímulo para animarme a seguir con estos desahogos de los cuales los hago partícipes.

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